La demanda y las exigencias en la arquitectura actual y venidera se enfrentan cada día con mayores retos relacionados con mejores soluciones sobre estructuras sostenibles.

Hasta ahora, el hormigón solo ha sido valorado como un material resistente para estructuras y fachadas, con una gran versatilidad en el campo de la arquitectura en cuanto a formas, texturas y colores.

Pero los avances en I+D+i han servido para obtener materiales alternativos, reciclables o aditivos mejorados

En este aspecto, la construcción de prefabricados de hormigón está permitiendo un uso más responsable de este material, y por ende permitiendo aportar soluciones constructivas más sostenibles.

Mucho más allá de lo versátil o estético

El hormigón ha demostrado estar a la altura de una demanda global más solidaria y sostenible para con el mundo y que van mucho más allá de lo versátil o estético.

La alta inercia térmica que caracteriza al hormigón lo ha posicionado como un material muy válido para una construcción que tiene como objetivo ser más sostenible reduciendo a lo largo de toda su vida útil el consumo energético de cualquier estructura. 

La reducción de gases de efecto invernadero, como consecuencia del ahorro energético que se produce durante la vida de cualquier estructura, asociado a la inercia térmica del mismo, es una ventaja medioambiental fundamental.

La búsqueda de la huella de carbono cero

El esqueleto de las edificaciones debe formar parte del concepto de huir del síndrome del edificio enfermo con sistemas estructurales efectivos para concebir espacios saludables.

En la búsqueda de la huella de carbono cero, nos encontramos con sistemas estructurales fundamentalmente desarrollados con hormigón prefabricado que permiten minimizar la energía en un 15% además de reducir la huella de carbono que contribuye al calentamiento global.

Además, existe garantía de que aporta una mayor estabilidad térmica en las edificaciones reduciendo los cambios bruscos de temperatura en el interior y además ahorrando hasta un 90% el consumo de energía de climatización.

Las capacidades del hormigón en los proyectos disponen de características de suma importancia debido a su función anticorrosiva, térmico-aislante y aislante acústica.

Proyectos con soluciones más sostenibles

Glassydur, como micro-hormigón de altas prestaciones, permite llevar a cabo soluciones más sostenibles en aquellos proyectos que están orientados a nuevos procedimientos constructivos altamente comprometidos con el mundo.

El conjunto de prestaciones que reúne este material resultan más competitivas y en sintonía con las necesidades y demandas del sector y la sociedad:

• Elevada resistencia y durabilidad
• Ignífugo y alta capacidad de compartimentación frente al incendio
• Poderoso aislante acústico
• Elevada inercia térmica que reduce la demanda energética 
• Bajos costes de mantenimiento
• Capacidad de mejorar la sostenibilidad

Teniendo en cuenta sus características y los beneficios que aporta Glassydur se amplía aún más un abanico de posibilidades encabezados por una gran capacidad evolutiva y de adaptación, ahora aún más notoria, como material de altas prestaciones en cualquier proyecto.

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