20 Abr Proyecto con luz natural: ¿es posible crearlo con GlassyDur®?
Existen muchas razones por las que la luz natural es importante para el ser humano y para cualquier ser vivo: nos ayuda a regular nuestro ritmo circadiano, influye de forma determinante en nuestra salud, mejora nuestro estado de ánimo e incluso previene la aparición de enfermedades.
Desde el punto de vista de la arquitectura, la luz es un elemento de valor incalculable que define espacios y los realza, genera emociones y crea significado.
Afortunadamente, cada vez existen más opciones a la hora de crear un proyecto con luz natural, especialmente a raíz de la aparición de materiales como el hormigón prefabricado, que nos ofrece posibilidades casi infinitas en cuanto a forma, textura, color… Prácticamente, cualquier diseño y estructura son posibles si hacemos uso de los elementos adecuados, tanto en su versión prefabricada como a medida.
Por eso en este artículo queremos repasar la importancia de la luz en la arquitectura y explorar algunos de los usos que materiales como el hormigón prefabricado de GlassyDur permiten a la hora de diseñar un proyecto arquitectónico.
La importancia de la luz en la arquitectura
Prácticamente, cualquier proyecto arquitectónico cuenta con la luz como elemento básico a la hora de configurar un espacio y transmitir un mensaje y una sensación determinada en quien lo transita.
Se trata de una herramienta clave en el lenguaje de la arquitectura, probablemente una de las más potentes, ya que el efecto que provoca en nosotros es universal e inherente a nuestra propia condición humana: todos nos sentimos conmovidos al recorrer un templo iluminado de forma tenue, al ser impactados por un rayo de luz perfectamente dirigido o al pasear a través de una sala repleta de claroscuros.
Su presencia, ausencia, los contrastes que genera, definen los usos y emociones asociadas a una construcción. Es por ello que, a la hora de desarrollar un proyecto, el arquitecto siempre debe valorar la relación de la obra con la luz, natural y artificial: nunca debe ser obviada ni olvidada, ya que se trata de un componente indispensable de cualquier obra.
La importancia de la iluminación natural es tan evidente que no existe periodo histórico en el que no haya sido tenida en cuenta.
Las catedrales góticas son un buen ejemplo de ello: la utilización de vidrieras de gran altura, la proporción de vidrio con respecto al resto de su estructura -casi como un esqueleto de piedra atravesado por los rayos- provocan un efecto sobrecogedor e íntimo que jamás sería posible sin un uso tan acertado de la luz. Existe, por tanto, un uso con una clara intención emocional que va mucho más allá de la simple practicidad.
En la arquitectura contemporánea, algunos de los grandes maestros de la luz son claros referentes que nos permiten explorar las infinitas posibilidades de la luz como elemento del lenguaje arquitectónico, muchas veces haciendo uso del hormigón prefabricado como complemento perfecto a la hora de crear un mensaje.
En definitiva, la luz diseña el recorrido visual y nuestro tránsito a través de un espacio; define y decide por nosotros lo visible y lo invisible, lo ausente y lo presente; ayuda a construir mensajes y sensaciones; y permite modelar objetos y realzar formas e ideas, así como ocultarlos o disfrazarlos. Alcanzar la maestría en el conocimiento y la utilización del lenguaje de la luz es todo un arte al alcance de pocos.
Por ejemplo, la dureza o suavidad de la luz, su forma, la manera en que la tamicemos, el uso de su recorrido a lo largo del día, su diálogo con materiales y formas… son algunos parámetros que nos permiten comunicarnos a través del uso de la luz.
La regla más importante es que el uso de la luz y su ausencia nunca pueden responder al simple azar: un proyecto arquitectónico de primer nivel la tendrá siempre muy en cuenta.
Además, no solo se trata de estética y lenguaje: el uso adecuado de la luz también es una herramienta clave a la hora de convertir un espacio en eficiente a nivel energético, ayudando con ello a reducir su huella de carbono. Cada vez más edificios son diseñados para aprovechar al máximo la incidencia del sol, tanto para regular la cantidad de luz disponible en cada momento como para aprovechar la energía solar y el calor que genera.
Se trata de un camino que debemos recorrer para hacer frente a los retos que plantea el cambio climático.
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Cómo aprovechar la luz natural en la arquitectura
Si analizamos las obras y proyectos desarrollados por arquitectos contemporáneos, comprobaremos cómo aprovechan la luz natural en sus diseños realizados sobre hormigón. Cada uno en su estilo, sin duda, comparten una forma de moldear el hormigón de forma que el efecto que se crea con el paso de la luz sorprende, emociona y personaliza la obra.
Decía Campo Baeza que “la luz es el material más lujoso que hay, pero como es gratis, no lo valoramos”.
Muchos otros arquitectos también han encontrado en el hormigón el aliado perfecto para comunicar sin límites a través de sus proyectos. Y es que, a diferencia de otros materiales, el hormigón prefabricado permite obtener diseños y soluciones constructivas y decorativas a medida que respondan a necesidades muy específicas y personalizadas, como es el caso de los productos de GlassyDur®.
Las innovaciones constantes en el sector cada vez ofrecen más oportunidades. Tanto es así que hoy podemos encontrar en el mercado incluso hormigón translúcido.
El resultado es que, actualmente, existen menos límites que nunca a la hora de definir cómo utilizar la luz en cualquier proyecto. Sea cual sea el mensaje que quieras transmitir o la emoción que quieras provocar -lujo, confort, seguridad, misterio, tranquilidad-, existe un elemento de hormigón que te permite dar forma a tu idea, apoyándote en la luz natural y/o en la luz artificial para completar tu obra.
En esta demandante tarea, las altas prestaciones del hormigón prefabricado y su capacidad de adoptar formas inusuales ha abierto un abanico de posibilidades inimaginables con resultados sorprendentes, inteligentes y comprometidos con el medio ambiente.
Sea cual sea tu proyecto arquitectónico, debes tener en cuenta que la luz debe utilizarse teniendo en cuenta tres dimensiones básicas:
- Su uso debe ser estético. Existe una dimensión emocional ineludible en cualquier proyecto que pretenda emocionar y conmover.
- Su uso debe ser funcional. Debemos tener en cuenta el uso que vamos a dar a un espacio para iluminarlo según las necesidades que queramos cubrir.
- Su uso debe ser eficiente. Debemos apostar por un uso de la luz que permita un aprovechamiento máximo de la iluminación natural, limitado el uso de la artificial en la medida de lo posible.
Más allá de ello, estos son algunos usos del hormigón prefabricado para jugar con la luz en un proyecto de arquitectura:
La luz como estructura
Son muy llamativos los proyectos en los que se juega con la presencia y ausencia de material para crear grandes líneas de luz que cortan la estructura, por ejemplo, en el caso de templos e iglesias. Se trata de un efecto impactante que, gracias al hormigón prefabricado, es posible en casi cualquier forma y dimensión.
La luz como guía
Sin duda, la luz también puede guiar por completo nuestra mirada y nuestro paso, llevándonos a transitar un espacio de una forma determinada y a experimentar ciertas sensaciones en un orden concreto, elegido por el arquitecto. Una iluminación bien pensada puede ayudarnos a poner el foco en un punto concreto y a ocultar otros, algo que puede lograrse teniendo muy en cuenta el recorrido de la luz a través de la estructura firme que proyectemos.
Dibujar con la luz
La forma en que filtremos la luz puede generar un sinfín de sensaciones al proyectarse en otros elementos estructurales, generando juegos de luces y sombras más o menos tenues, con distintas formas e incluso movimiento. Este tipo de diseño puede lograrse a través de cualquier material que permita filtrar la luz a nuestro antojo, como ocurre con el hormigón prefabricado.
Con el desarrollo de materiales GRC como GlassyDur® y de metodologías como el Sistema BIM, el arquitecto puede tener control total del proceso constructivo, realizar cambios, prever cualquier problema y conocer con total precisión el resultado final.
Un caso de éxito: celosías GlassyDur como revestimiento para dar protagonismo a la luz
Desde GlassyDur® hemos participado en varios proyectos arquitectónicos en los que la luz natural debía ser el elemento protagonista de la estructura. Para conseguirlo con total éxito fue fundamental trabajar conjuntamente con los estudios de arquitectura a cargo de ellos.
Por ejemplo, las oficinas de Seaside hotels requerían de un revestimiento exterior envolvente con celosías de GlassyDur®, por sus propiedades inertes y altamente resistentes.
El resultado es un proyecto en el que, durante el día, la luz natural traspasa las formas circulares de la celosía, dibujando sombras que crean un diseño vanguardista, mientras que, por la noche, la luz LED le otorga un acabado elegante y con estilo.
Este proyecto vanguardista requería de un alto nivel de control y coordinación en la fabricación e instalación que fue cumplido con éxito reduciendo considerablemente los tiempos de ejecución.
El resultado consiguió cumplir con todos los requisitos del proyecto, creando una estructura con forma, personalidad y presencia, gracias al uso inteligente de la luz en la arquitectura, combinado con las múltiples posibilidades que ofrece nuestro amplio catálogo de materiales.
Si quieres más información sobre las soluciones constructivas de hormigón prefabricado de GlassyDur® y cómo pueden ayudarte a dar forma a tu próximo proyecto de arquitectura, ponte en contacto con nuestro equipo técnico.